- Cantón suizo de Basilea aprueba en referéndum la financiación para acoger Eurovisión 2025
- La expulsión de migrantes en EEUU podría costar caro a la economía
- Irán anuncia que mantendrá negociaciones sobre programa nuclear el viernes con Francia, Alemania y Reino Unido
- Países en desarrollo tachan de "insulto" el acuerdo climático de la COP29
- Verstappen conquista en Las Vegas su cuarto título seguido de Fórmula 1
- La policía de objetos perdidos de Tokio devuelve llaves, paraguas o mascotas
- Rumania elige presidente bajo la sombra de la extrema derecha
- Max Verstappen, un piloto indomable a la caza de los mitos de la F1
- La IA generativa, aliada o rival de los creadores musicales
- Verstappen conquista su cuarto título seguido de Fórmula 1 en Las Vegas
- Más de 80 muertos en tres días de enfrentamientos entre sunitas y chiitas en Pakistán
- Verstappen es tetracampeón de Fórmula 1 y Russell gana el GP de Las Vegas
- Roma, una ciudad en obras a un mes del Jubileo 2025
- Incendio en una barriada de la capital de Filipinas quema cientos de hogares
- La COP29 logra un acuerdo de financiación climática de USD 300.000 millones anuales para países en desarrollo
- Más de 50 muertos en bombardeos israelíes en Líbano
- Marchas en Francia denuncian violencias contra las mujeres
- Los países aprueban en la COP29 las reglas para las transacciones de carbono entre Estados
- Miles de personas se manifiestan en Barcelona contra el precio de los alquileres
- Al menos 45 muertos en bombardeos israelíes en Líbano
- ¿Qué ocurriría si Google es forzado a vender Chrome?
- El brazo armado de Hamás anuncia la muerte de una rehén en Gaza
- Israel trata de tomar ciudad del sur de Líbano, según agencia oficial libanesa
- Las naciones más vulnerables al cambio climático protestan en la COP29 y piden más dinero
- Serbia prolonga la detención de arrestados por derrumbe mortal en una estación de trenes
- El bombardeo israelí en Beirut tuvo como objetivo un alto cargo de Hezbolá, según una fuente de seguridad
Supervivientes israelíes del festival atacado por Hamás se reponen en un bosque de Chipre
Un grupo de jóvenes israelíes en Chipre canta ruidosamente, ríe y grita de alegría con la aparición del arcoíris. Pero lo que los llevó allí es un trauma abrumador.
"Parecemos felices, pero dentro no lo estamos", dice Tamar, de 23 años, superviviente de los ataques de Hamás del 7 de octubre, con la mano en el corazón mientras intenta encontrar las palabras adecuadas.
Es difícil contar su historia, reconoce la joven, "porque el resto de la gente no puede entenderlo".
Esta profesional del marketing, que prefiere no aparecer con su nombre completo, participa junto a otros compatriotas en un programa en esta isla mediterránea para ayudarles a superar los horrores vividos.
Sobrevivieron al ataque de Hamás en el festival de música Supernova, donde los milicianos islamistas mataron a más de 270 personas como parte de una incursión en el sur de Israel que dejó 1.200 muertos, según las autoridades israelíes.
Los asistentes al festival fueron llevados a Chipre por Yoni Kahana, de 35 años y propietario del resort Secret Forest en las montañas cerca de la ciudad de Pafos, donde ha puesto en marcha un programa de tratamiento gratuito con la ayuda de IsraAID, una importante ONG israelí.
"La principal ventaja es el silencio", dice a la AFP Tal Nehushtai, de 29 años. "Aquí nadie habla de la guerra, es pura sanación al máximo nivel".
La tranquilidad de las montañas chipriotas contrasta crudamente con la situación en Gaza, a apenas 400 kilómetros, donde la represalia israelí para "aniquilar" a Hamás ha matado más de 11.500 personas, en su mayoría civiles, según el gobierno del movimiento islamista que controla el territorio.
Los jóvenes israelíes han intentado dejar de lado sus traumas, aunque sea brevemente.
- Celebrar la vida -
Cada grupo de 50 supervivientes se aloja cinco días en el resort. Kahana explica que tienen 1.400 inscritos y que 200 ya se han beneficiado del programa.
En él les ofrecen sesiones de terapia individuales y grupales, además de tratamientos alternativos como ejercicios de meditación inspirados en la tradición judía, el yoga y talleres de manualidades.
Los participantes también pueden someterse a tratamientos contra la adicción. Los terapeutas del programa explicaron a la AFP que muchos de los asistentes al festival estaban bajo el efecto de las drogas durante el ataque. Algunos sufren ahora por la dependencia de los narcóticos.
Para muchos de los supervivientes, pasar tiempo con personas que han vivido lo mismo es de una gran ayuda.
El lunes por la noche, el grupo organizó una fiesta en los bajos del hotel hasta la mañana siguiente, como hicieron el 7 de octubre.
"Nos gusta bailar, sentir este amor, esta felicidad, celebrar la vida", dice Lior Auvgang, un joven de 26 años alto y con una poblada barba pelirroja.
Auvgang dice que fue uno de los primeros en darse cuenta de que el festival Supernova, cerca de la Franja de Gaza, estaba siendo atacado.
Recuerda que, al ir al baño, vio un gran número de cohetes. Auvgang, un ex enfermero militar, pasó más de dos horas ayudando a atender a los heridos.
La presencia de hombres armados de Hamás lo obligó a huir a un bosque y a esconderse durante siete horas, en las que tuvo tiempo de enviar un mensaje de despedida a su madre. Dos de sus amigos murieron en el ataque, y otros dos fueron secuestrados y llevados a Gaza.
- Ataques de pánico -
Aunque algunos están bien dispuestos a hablar, otros siguen traumatizados y se pasean por el hotel con mantas para protegerse del fresco.
Las conversaciones y paseos a menudo se ven interrumpidos por abrazos largos y emotivos.
Nehushtai, trabajador agrícola y tatuador, es uno de los más habladores. Cuenta la huida campo a través, para evitar a los milicianos de Hamás y sus balas, cómo tuvo que esconderse en unos tubos de cemento y finalmente entre unos naranjos, durante seis horas, para escapar a la masacre.
Cuando los hombres de Hamás encontraron su coche y empezaron a merodear entre los árboles, pensó, al igual que sus amigos, que su muerte era inminente.
"Vimos sus piernas y sus caras. Si movíamos cabeza, nos oirían, así que me limité a seguirlos con la mirada", cuenta a AFP. "Fue un milagro" que no los vieran, asegura.
Pese a la horrible experiencia, muchos de los supervivientes retomaron su vida poco después.
Cuenta que la ayudó a sentir que recuperaba el control, después de verse huyendo, desprotegida, de los disparos de Hamás. Pero cuando hizo ejercicios con armas de fuego, los disparos le causaron un ataque de pánico.
J.Fankhauser--BTB